Tras un acuerdo con los ingenios azucareros del país, el Gobierno aseguró el descenso del precio de azúcar, a partir de la segunda quincena de abril de este año, hasta menos de 5 bolivianos el kilo del producto.
El anuncio lo hizo en la red Erbol la ministra de Producción, Teresa Morales, quien consideró que el precio actual, de 7,5 bolivianos (y a 8 bolivianos por parte de los ingenios), es sólo un "mecanismo ad hoc en relación al déficit de producción interna". "En abril empieza la zafra de todos los ingenios y ellos se han comprometido dos cosas: primero, va a haber el abastecimiento que siempre hubo (…) y, segundo, ellos van a bajar a menos de 5 bolivianos el precio en el mercado", dijo la autoridad.
Según explicó, en el tiempo previo, en los dos meses y medio, el precio acordado no sufrirá variaciones; es decir, se mantendrá hasta un tope de 8 bolivianos el kilogramo para "el consumidor final". Asimismo, los empresarios azucareros se comprometieron a "no colgarse al precio internacional".
Entretanto, Morales informó, que están en tránsito a Bolivia 35.000 quintales de azúcar brasileña para abastecer el mercado, en el que todavía existe especulación, contrabando y altos precios del azúcar.
En su análisis, la Ministra dijo que la carencia de azúcar tiene dos razones: bajó el rendimiento de la producción de caña, la materia prima del producto, debido por la sequía que sufrieron los campos y el precio internacional derivado del mayor uso de caña en el procesamiento de biocombustibles.
Afirmó que existe una "especulación mundial" que afectó el mercado nacional. Además, aclaró que en Bolivia el Gobierno dejó "un mercado libre en manos de privados, convencido de su sentido patriótico".
Sin embargo, rechazó el criterio en sentido de que el "gasolinazo" haya sido el origen de la carencia y el incremento de precios del azúcar. "Absolutamente, es la inflación mundial", insistió.
El lunes, el Gobierno dispuso la eliminación del costo del endulzante, que la Empresa de Apoyo a la Producción de Alimentos (Emapa) vendía en 4,3 bolivianos el kilo, a pesar de su precio internacional promedio de 8 bolivianos. Desde ese día, el precio Emapa al consumidor final es de 7,5 bolivianos y el de los ingenios, 8bolivianos. Sin embargo, las filas por la demanda del producto no cesaron en las ciudades, como esperaron las autoridades a partir de la aplicación de la medida.
El anuncio lo hizo en la red Erbol la ministra de Producción, Teresa Morales, quien consideró que el precio actual, de 7,5 bolivianos (y a 8 bolivianos por parte de los ingenios), es sólo un "mecanismo ad hoc en relación al déficit de producción interna". "En abril empieza la zafra de todos los ingenios y ellos se han comprometido dos cosas: primero, va a haber el abastecimiento que siempre hubo (…) y, segundo, ellos van a bajar a menos de 5 bolivianos el precio en el mercado", dijo la autoridad.
Según explicó, en el tiempo previo, en los dos meses y medio, el precio acordado no sufrirá variaciones; es decir, se mantendrá hasta un tope de 8 bolivianos el kilogramo para "el consumidor final". Asimismo, los empresarios azucareros se comprometieron a "no colgarse al precio internacional".
Entretanto, Morales informó, que están en tránsito a Bolivia 35.000 quintales de azúcar brasileña para abastecer el mercado, en el que todavía existe especulación, contrabando y altos precios del azúcar.
En su análisis, la Ministra dijo que la carencia de azúcar tiene dos razones: bajó el rendimiento de la producción de caña, la materia prima del producto, debido por la sequía que sufrieron los campos y el precio internacional derivado del mayor uso de caña en el procesamiento de biocombustibles.
Afirmó que existe una "especulación mundial" que afectó el mercado nacional. Además, aclaró que en Bolivia el Gobierno dejó "un mercado libre en manos de privados, convencido de su sentido patriótico".
Sin embargo, rechazó el criterio en sentido de que el "gasolinazo" haya sido el origen de la carencia y el incremento de precios del azúcar. "Absolutamente, es la inflación mundial", insistió.
El lunes, el Gobierno dispuso la eliminación del costo del endulzante, que la Empresa de Apoyo a la Producción de Alimentos (Emapa) vendía en 4,3 bolivianos el kilo, a pesar de su precio internacional promedio de 8 bolivianos. Desde ese día, el precio Emapa al consumidor final es de 7,5 bolivianos y el de los ingenios, 8bolivianos. Sin embargo, las filas por la demanda del producto no cesaron en las ciudades, como esperaron las autoridades a partir de la aplicación de la medida.
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